El floreo de llamas: patrimonio cultural inmaterial del Perú.
Es una ceremonia ancestral de los pueblos indígenas que habitan los sectores alto andinos de Perú y Bolivia, donde se reúne la familia dueña de las llamas a "marcar" a los camélidos, en un rito que combina llamativos colores de lanas, una bebida a base de plantas que se da a tomar a las llamas y un ritual que convoca a las fuerzas del más allá para la prosperidad del nuevo año.
Previamente se hace una ofrenda a los Apus con hojas de coca y otros elementos simbólicos siguiendo las tradiciones milenarias de sus ancestros.
Primeramente, se reúne a las llamas en el corral para su posterior floreo, en un ambiente cargado de misticismo y festividad en la comunidad.
A continuación, las sujetan de la cabeza y las patas delanteras, impidiendo cualquier movimiento que el animal quiera realizar y se les da de beber un brebaje a base de plantas del lugar para darles fuerza y se reproduzcan.
Después, con una aguja y evitando dañar al animal, traspasan la oreja con una lana que en la parte del medio lleva un pompón de llamativos colores.
Entre cantos y bailes, finaliza esta ceremonia festiva esperando que este sea un año de abundancia para sus familias y animales.
