top of page

Andinismo, caminatas y tours guiados en Cusco

Los ''Apus'' o dioses montaña: intermediarios en la cultura andina.


APU AUSANGATE

Los mitos actuales sobre los Apus o dioses montaña, siguen formando parte de la vida cotidiana y de la dinámica propia de los espacios natural y social en los Andes. El término ’’Apu’’ se usa para designar a los espíritus que habitan en las montañas, en el entorno de las comunidades andinas actuales, en particular de los Andes del Sur. Estos apus formaban parte de un sistema religioso que concebía el espacio como un campo sagrado limitado por wakas-hitos. En el contexto quechua-hablante actual (más de 7 millones), los Apus (señores) junto con la Pachamama (Madre Tierra) son intermediarios andinos que han sobrevivido a la evangelización cristiana.

Estos dioses montaña formaron parte de un sistema de wakas (templos y adoratorios), lugares sagrados que se ubicaban en los seqes y que perviven en la memoria colectiva. Hanaq Pacha y Ukhu Pacha (el mundo de arriba y el de adentro) se concebían como realidades interactuantes, con las que los hombres de Kay Pacha (el mundo de la superficie) podían comunicarse, sea a través de mediadores (las deidades, sus diversas manifestaciones y los sacerdotes o especialistas) o de espacios físicos sagrados tales como: las paqarinas (lugares de origen) y las wakas en general.


Los pueblos andinos dominaron el espacio no sólo en un sentido horizontal sino también vertical, es decir, dirigieron su mirada y esfuerzos hacia las enormes montañas de la cordillera andina. Las culturas americanas pre-incas veían a las montañas como la residencia o materialización de sus deidades, idea que llevó a construir recintos destinados a las deidades tutelares en sus cumbres.


La distribución espacial de las wakas, independientemente de su tamaño, facilitaba la comunicación entre los hombres y con el mundo sobrenatural, organizaba el territorio y moldeaba la vida social y religiosa de los pobladores. Los centros de culto a las wakas de mayor poder ejercían un importante dominio y cumplían funciones complejas; su acción era particularmente decisiva en varios aspectos: la delimitación ritual del territorio hegemonizado por el santuario, el reforzamiento de vínculos políticos y sociales entre el centro ceremonial y los pueblos dentro de su ámbito de influencia, y los flujos e intercambio de productos que permitían establecer fronteras y ámbitos de influencia económica. Hoy sabemos que los santuarios andinos, los dioses montaña o Apus y las peregrinaciones religiosas que hacia ellos tenían lugar, estaban vinculados a la organización económica, sobre todo al intercambio de bienes mediante el trueque.


Con la Invasión española y la subsecuente evangelización cristiana en los Andes, la religión oficial de los Inkas fue la más afectada y sus expresiones de culto fueron las primeras en desaparecer. Otro destino siguieron los cultos regionales y locales, de carácter más popular, tan arraigados que tardaron mucho tiempo en ser extirpados y que hoy en día aún participan de muchas formas en la definición del pensamiento y la cosmovisión del hombre andino, por ejemplo la festividad del Señor de Qoyllurit’i declarado patrimonio Inmaterial de la humanidad por la UNESCO desde el 2011.

Apu Salkantay

Para finalizar, podemos decir que la solidaridad de los pobladores de estos territorios andinos es una combinación del parentesco y los vínculos territoriales, tanto como el simbolismo. En este sentido, el Apu viene a constituir una metáfora holística y de unificación de los grupos étnicos andinos, como lo diría un aymara: “La montaña es como nosotros y nosotros

somos como la montaña”.


Comments


Entradas destacadas
Entradas recientes
Vuelve pronto
Una vez que se publiquen entradas, las verás aquí.
Archivo
Buscar por tags
No hay etiquetas aún.
Síguenos
  • Facebook Basic Square
  • Blogger Social Icon
  • Google+ Basic Square
RSS Feed
bottom of page